La interferencia política de China en la situación humanitaria de los rohingyas en Myanmar desde el 2021 hasta el 2023
septiembre 04, 2024Por: Abril Cabrera Angeles*
Para
citar este artículo: Abril Cabrera Angeles,
“La interferencia política de China en la situación humanitaria de los
rohingyas en Myanmar desde el 2021 hasta el 2023”, Blog del Grupo de Estudios Sobre Eurasia, 03 de septiembre de 2024,
[https://euroasiaticos.blogspot.com/2024/09/la-interferencia-politica-de-china-en.html]
Introducción
Los
rohingyas son una minoría étnica y musulmana radicada en Myanmar, país que cuenta
con más de 130 grupos étnicos diferentes.[1]
El gobierno myanmarense agrupa a la población en ocho etnias principales; sin
embargo, los rohingyas no son reconocidos oficialmente como un grupo étnico ni
se les reconoce como ciudadanos. En 1962, el Tatmadaw tomó el poder del país,
siendo este un ejército de mayoría budista y cuyos integrantes pertenecen a uno
de los mayores grupos étnicos, los burma. Desde entonces, los rohingyas son
perseguidos por el Estado y la mayoría están situados en el estado de Rakhine.
Si bien, en 2011 se instauró, “una forma indirecta y más liberal de gobierno
militar” que duró hasta el 2021,[2] la
persecución no disminuyó.
En
el 2017, en Rakhine, comenzó una campaña genocida hacia los rohingyas liderada
por el Tatmadaw.[3] El
ejército quemó aldeas y cometió asesinatos en masa, y, en consecuencia, arriba
de 700 mil rohingyas migraron hacia Bangladesh[4]
ese mismo año. Cuatro años después, en febrero el Tatmadaw lanzó un golpe de
estado[5] contra
el gobierno en el poder, y comenzó una inestabilidad política en Myanmar.
Por
su parte, China ha tenido una relación con Myanmar de cooperación económica y
militar, pero en el período de 2011 a 2021, China no tuvo el mismo acercamiento
con Myanmar ya que era afín al Tatmadaw.[6]
Sin embargo, tras el golpe de estado, China ha vuelto a acercarse para lograr
restablecer su influencia en Myanmar. La situación general de los rohingyas es
crítica y, China protege al Tatmadaw de las represalias internacionales, no
permite intervención de otras potencias pues pide se respete la soberanía de
Myanmar, pero él sí interfiere directamente.[7]
Lo que se plantea es, ¿por qué China interfiere políticamente en la situación
actual de los Rohingyas en Myanmar desde 2021? A través de la interferencia
política, China limita e impide la intervención de otras potencias en la crisis
de los rohingyas y dificulta una posible influencia en Myanmar, protegiendo y
asegurando así sus intereses geoestratégicos en el país.
China
ha catalogado la campaña de genocidio contra los rohingyas como un problema de
soberanía[8] y por
lo tanto, argumenta que ningún otro país puede intervenir, exceptuando a
Bangladesh, que ha refugiado a la minoría musulmana desde 2017. No sólo China
ha defendido a la junta militar en discurso, pues en febrero del 2021, este
junto con Rusia bloquearon una declaración del Consejo de Seguridad de la ONU
(CSNU) donde se condenaba el golpe de estado.[9]
Si
bien, la prioridad de China es volver a consolidar la influencia y presencia
que perdió parcialmente de 2011 a 2021, sus intereses geoestratégicos no se
quedan atrás. Geopolíticamente, Myanmar
es de suma importancia para China, pues “es el único país vecino que
proporciona a China acceso directo al Océano Índico y, por lo tanto, le permite
evitar el disputado Mar de China Meridional”.[10]
Myanmar ocupa un lugar clave en el megaproyecto chino de la Nueva Ruta de la
Seda, pues tiene una larga costa y acceso al Océano Índico y, sobre todo, China
busca asegurar su acceso a fuentes de energía para satisfacer sus necesidades.[11] Sin
embargo, los megaproyectos de China en Myanmar se han visto pausados por la
situación política que vive el país.[12]
Aquí
podría cuestionarse si el encubrimiento y respaldo a la junta militar es con el
fin de poner en marcha sus proyectos cuanto antes. Así como, evitar que otras
potencias se involucren en lo que sucede en Myanmar, y, por lo tanto, puedan
interferir con la fuerte presencia que está creando China con su megaproyecto.
Lo
que resulta más interesante sobre los intereses geopolíticos chinos, es que uno
de los puntos clave del Corredor Terrestre de la Franja Económica de la Ruta de
la Seda, que conectará a cuatro países, Myanmar, China, India y Bangladesh,
estaría ubicado en Rakhine.[13] El
mismo estado donde los rohingyas fueron perseguidos, algunos obligados a
desplazarse y otros permanecen atrapados ahí. Lo que tiene planeado este
Corredor es colocar en el norte de Rakhine un oleoducto,[14]
y el puerto de Kyaukpyu es vital pues será la entrada para el oleoducto.[15] China
ya ha invertido una gran cantidad de dinero, además de que será un enclave
comercial crucial para el Corredor.
Se
puede señalar que la interferencia de China en la situación humanitaria de los
rohingyas es oportuna, puesto que, el argumento de China, además que califica
la persecución contra los rohingyas como algo interno, es que “subestima la
gravedad de la crisis al atribuir la violencia al subdesarrollo económico”.[16] China
pareciera tomar la crisis de los rohingyas como una razón más por la cual
Myanmar necesita tener más desarrollo económico, ósea, continuar cuanto antes
con los avances de la Nueva Ruta de la Seda.
Ahora
bien, China ha protegido al Tatmadaw ante el Consejo de Seguridad de la ONU,
pero recientemente propuso una solución para la situación humanitaria de los
rohingyas en Bangladesh. En abril del 2023, China junto con Bangladesh
plantearon un plan para repatriar al casi millón de rohingyas que se encuentran
en campamentos de este último.[17] Una
vez repatriados a Myanmar, realmente los rohingyas estarían a disposición de la
junta militar que los persigue, por lo que no parece ser una solución real ni
bien planeada. Podría señalarse que China busca una solución humanitaria para
estabilizar el estado de Rakhine, pero ¿realmente está buscando resolver la
crisis de los rohingyas con este tipo de planes? O más bien, es sólo una solución rápida para
poder seguir con sus proyectos geoestratégicos en Rakhine.
Las
consideraciones finales son, que China aprovechó la coyuntura del golpe de
estado del Tatmadaw para restablecer su influencia en Myanmar y retomar sus
proyectos de la Nueva Ruta de la Seda en este. Así como, su interferencia en la
situación humanitaria no es más que política, motivada por intereses
geoestratégicos. De igual manera, la persecución hacia los rohingyas dejó de
ser un problema interno desde que China y Rusia intervinieron a favor de la
junta militar ante el Consejo de Seguridad. Y que China no permita la
intervención de otras potencias, pero sí interfiera directamente, y proponga
una solución poco realista al problema refuerza la idea de que sus
megaproyectos están por sobre una crisis humanitaria. La cooperación entre
otras potencias pareciera ser una luz de esperanza para los rohingyas, pero la
influencia y presencia de China en Myanmar aumenta, y, por lo tanto, su
interferencia política también lo hace.
*Estudiante de la Licenciatura en Relaciones
Internacionales en FES Acatlán.
Fuentes de consulta:
Charbonneau, Luis, “Time to Call China’s Bluff on Myanmar at UN”, Human Rights Watch, 5 de febrero de 2021, disponible en https://www.hrw.org/news/2021/02/05/time-call-chinas-bluff-myanmar-un (consultado el 14 de mayo de 2024)
Estiak, Muhammad, “The Rohingya Crisis and the Myth of Myanmar Sovereignty”, The Diplomat, 15 de junio de 2023, disponible en https://thediplomat.com/2023/06/the-rohingya-crisis-and-the-myth-of-myanmar-sovereignty/ (consultado el 11 de mayo de 2024)
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Lintner, Bertil, “China’s Aggresive Return to Myanmar”, en Global Asia, N° 1. 2023.
Naing, Ingyin, “Rohingya Refugees Wary as China Develops Plan for Repatriation”, Voa, 03 de agosto de 2023, disponible en https://www.voanews.com/a/rohingya-refugees-wary-as-china-develops-plan-for-repatriation-/7211192.html (consultado el 18 de mayo de 2024)
Riveros, Mateo, “Genocidio del siglo XXI: el caso de los rohingya”, en Oasis, N° 36. 2022.
Strangio, Sebastian, “China, Russia Again Veto UN Statement on Myanmar Conflict”, The Diplomat, 30 de mayo de 2022, disponible en https://thediplomat.com/2022/05/china-russia-again-veto-un-statement-on-myanmar-conflict/ (consultado el 14 de mayo de 2024)
Torre, Jason, “The Limits of Beijing’s Support for Myanmar’s Military”, United States Institute of Peace, disponible en https://www.usip.org/publications/2023/02/limits-beijings-support-myanmars-military (consultado el 16 de mayo de 2024)
Tosatti, Irene, “China’s Foreign Policy in Southeast Asia: The Evolution of Sino-Myanmar Relations After Naypyidaw’s Political Transformation of 2011”, Semantic Scholar, disponible en https://www.semanticscholar.org/paper/China%E2%80%99s-Foreign-Policy-in-Southeast-Asia%3A-The-of-of-Tosatti/1333ec3d1a4b7c41bbbe5c86a564fb9e5e0b8183 (consultado el 10 de mayo de 2024)
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